🧽4 consejos sobre como cuidar mi coche para que dure mas tiempo

¿Cómo cuidar mi coche para que dure más tiempo de forma que siga funcionando como el primer día, o casi? Es posible que le hayas dado vueltas a esta cuestión alguna vez. Primero porque comprar un coche es una de las inversiones más serias que afronta una persona, o una familia. Para la mayoría de nosotros requiere ahorrar, e incluso en el caso de que tengamos los recursos, a veces cuesta tomar la decisión. Y segundo porque como ser humano que eres diseñado para amar, probablemente le tengas afecto a ese viejo coche que tanto te gusta, que tanta ilusión te hizo cuando compraste y en el que tantas cosas has vivido. En Autootools te entendemos perfectamente, y vamos a darte algunos consejos de como cuidar tu coche, la mayoría baratos, que si sigues conseguirás que prácticamente no pasen los años por él y duré más tiempo.

Lo evidente: el mantenimiento recomendado por el fabricante.

Empecemos por lo obvio. No pensábamos ni mencionar esto pero nuestra conciencia no nos deja si de alargar la vida útil del coche es de lo que hablamos, porque no por obvio deja de ser importantísimo. Sigue rigurosamente el mantenimiento indicado por el fabricante en el manual del vehículo. Ellos lo han diseñado, conocen el funcionamiento, el desgaste y duración de las piezas, las condiciones óptimas, aquello que conviene revisar y en qué momento. Hazles caso. Llevar el coche a revisión no es un gasto, es una inversión: te ahorrará muchos disgustos.

Consejos para la conducción

Te ofrecemos algunas indicaciones para cuando estés al volante:

Trata bien el sistema de transmisión

Este punto es muy importante porque alargará la vida útil de un sistema sobre el que cualquier reparación acostumbra a ser bastante costosa.

Trata bien el sistema de transmisión-Autootools

En primer lugar, el embrague no es un reposapiés. Písalo sólo cuando vayas a cambiar de marcha. Si tienes la costumbre de llevar el pie izquierdo sobre el pedal de embrague, aunque no te lo parezca estás ejerciendo siempre alguna presión por mínima que sea. Debajo del pedal hay una serie de engranajes que se desgastan con el uso y que incluso se pueden dañar o romper. Si tienes esta costumbre lo que estás haciendo en resumen es desgastar el sistema constante e innecesariamente. No lo hagas, la mayoría de coches hoy en día tienen un poco más a la izquierda un espacio que sí es un reposapiés.

Lo mismo para la mano en la palanca de cambios. Apoyar el peso del brazo en la palanca castiga la caja de cambios de manera similar. Y además, aunque no es el tema que nos ocupa, es perjudicial para tu seguridad y la de los demás. Las dos manos en el volante.

En general, cuida del sistema durante la conducción y trátalo con suavidad: no cambies de marcha a medio embrague, esto aumenta la fricción con la caja de cambio. No lo hagas patinar. Si necesitas salir rápido, pisa el acelerador a fondo únicamente cuando ya hayas soltado todo el pedal de embrague. Así es como lo hacen los pilotos profesionales. No revoluciones el motor con el embrague pisado.

Finalmente, traza bien el recorrido con la palanca de cambio. Puedes cambiar rápido si quieres, pero para pasar de segunda a tercera o de cuarta a quinta, y viceversa, debes pasar por punto muerto. No hagas recorridos rectos, porque la palanca no los tiene.

Por lo que respecta a vehículos con cambio automático, no cambies de marcha con el coche rodando. El cambio está compuesto por una serie de discos, y si pones la marcha atrás cuando el coche está andando hacia alante o al revés, estarás usando la fricción de esos discos para frenar. Ese no es su cometido, y harás sufrir a la transmisión. Hay otro sistema en el coche ideado específicamente para frenar: los frenos. Lo de no llevar la mano en el pomo sirve también para esta clase de vehículos.

Cuida el motor

El motor de un coche está compuesto por muchas piezas de distintos materiales. Un complejo sistema que está diseñado para que todo encaje a la perfección a una cierta temperatura, generalmente unos 90ºC. Temperaturas inferiores o superiores hacen que unos materiales se dilaten más que otros e incrementa la fricción entre componentes. El desgaste de las piezas del motor en frío puede llegar a ser decenas de veces superior que trabajando a temperatura óptima.

Además, cuando arrancas el vehículo tras horas o días con el motor parado, el aceite está depositado en el cárter, y es bueno darle tiempo para que pueda recorrer el circuito y lubricar todos los componentes.

Por todo ello, te recomendamos esperar al ralentí unos segundos, o incluso algún minuto si hace mucho frío, antes de iniciar la marcha. Y cuando lo hagas, hazlo tranquilamente hasta que se alcance la temperatura de trabajo. De manera similar a como sucede contigo, él necesita calentar antes de hacer ejercicio.

Del mismo modo en vehículos turboalimentados y después de un viaje largo, te aconsejamos esperar un par de minutos antes de apagar el motor para que el circuito de refrigeración tenga tiempo de enfriar el turbo. Hoy en día muchos coches permiten que el sistema siga funcionando unos momentos después de apagado el motor con ese cometido, pero nuestra recomendación es que esperes unos instantes de todos modos. Siguiendo con el símil anterior, seguramente también te recomienden hacer unas respiraciones y estiramientos después de tu sesión de ejercicio.

Por último te recomendamos no forzar el motor, ni por arriba ni por abajo. Por arriba es aconsejable no superar el 60% del régimen máximo de revoluciones. Eso no significa que puntualmente, en circuito o en condiciones de seguridad no puedas apretarle y divertirte un rato. Pero como estilo de conducción habitual no es recomendable. Tampoco es bueno conducir a un régimen demasiado bajo: al motor le hace mucho daño pisar el pedal a fondo cuando gira demasiado lento, porque el esfuerzo para subir es enorme. Es mejor que bajes una o dos marchas.

Consejos de mantenimiento

Te damos algunos consejos de mantenimiento para tener tu coche siempre en perfectas condiciones.

Usa un buen aceite

Utiliza siempre aceite sintético de gran calidad. Esto es importante especialmente tal como comentábamos anteriormente mientras se calienta el motor, y sobre todo cuando hace mucho frío. Siempre que cambies el aceite, cambia el filtro. No tiene ningún sentido poner un aceite nuevo a trabajar con el filtro sucio.

Te aconsejamos comprobar el nivel de aceite una vez al mes. Las condiciones ideales son hacerlo en llano, a poder ser siempre en el mismo sitio, y cuando el motor lleve apagado aproximadamente quince minutos (ni recién apagado ni tras horas o días inactivo). Cuando lo hagas, ya que estás, mira la presión de los neumáticos.

Tenemos un artículo completo sobre cambio de aceite que puedes consultar para ampliar información.

Haz un buen mantenimiento del sistema de distribución

Cambiar la correa de distribución cuando toca es muy importante para evitar males mayores. Hazlo cuando se indique en el manual del fabricante. Y si es un poco antes, no pasa nada. Aprovecha la ocasión para cambiar rodillos, tensores y bomba del agua. El motor lo agradecerá y no incrementará excesivamente el coste de la operación. En cambio si tienes que sustituir estas piezas por separado a posteriori sí te costará más dinero. Muchos profesionales lo hacen directamente, pero asegúrate de pactarlo así cuando quedes con tu mecánico. Recuerda que este mantenimiento es fundamental porque si la correa se rompe, el motor quedará inservible. Y probablemente el coche también, a no ser que estés dispuesto a hacer un gasto que podría llegar a las cinco cifras.

Haz un buen mantenimiento del sistema de distribución-Autootools

Otro apunte, hay muchos vehículos que no tienen correa de distribución, sino cadena. Teóricamente la cadena dura toda la vida del coche y esto hace que mucha gente se olvide. Es un error, la cadena también se puede romper. Revísala periódicamente.

Ojo al sistema de refrigeración

El sistema de refrigeración evita el calentamiento excesivo del motor. Es importante controlar que el nivel de líquido refrigerante es el adecuado. El nivel máximo se encuentra marcado en el interior del depósito. Igual que el aceite, se debe mirar en llano y una vez el motor se ha enfriado. Y también igual que en el caso del lubricante, el nivel debe estar entre unos baremos, porque un exceso de líquido hará que el sistema trabaje a una presión mayor de la adecuada y podría hacer que aparecieran fugas, roturas de manguitos y pérdidas de sellado. Permanece atento también ante estas eventualidades y si observas cualquier deterioro en alguna pieza, sustitúyela.

Revisa regularmente la amortiguación

La amortiguación no es únicamente un elemento de confort. Es un sistema de seguridad básico y protege el coche contra las vibraciones causadas por las irregularidades del terreno, baches, badenes, etc. Revísala periódicamente y sustitúyela cuando sea necesario. No es lo esperable que el juego de amortiguadores de serie dure toda la vida útil del vehículo.

Cuando el coche tenga bastantes años, puedes cambiar también los silentblocks de los trapecios y del motor. No es muy costoso, minimizará las vibraciones y ganarás en comodidad. Le quitarás varios años de encima a la sensación en el interior.

Controla el óxido

El óxido y la corrosión son los peores enemigos de la carrocería, en especial si se trata de un coche clásico. Muchas veces aparecen en lugares que quedan fuera de la vista, como en el interior de los pasos de rueda o debajo de los parachoques. Echa un vistazo de vez en cuando.

Controla el óxido-Autootools

Lavar el coche con regularidad ayuda a evitar que la suciedad se quede en pequeños recovecos susceptibles de acumular porquería y por tanto generar óxido.

En ese sentido te desaconsejamos el uso de los autolavados automáticos. Dañan la carrocería y la pintura, y favorecen la acumulación de agua en ciertas partes. Muy particularmente si tienes un descapotable con techo de lona, ni se te ocurra.

Utiliza recambios de primeras marcas

Los recambios tienen una calidad determinada y una vida útil estimada. Evidentemente cuanto mayor calidad, más larga es esta vida, y mejor cumplirá su función. Por tanto la recomendación es que utilices los recambios del fabricante, y si no puede ser, vete a primeras marcas. Aunque te parezca algo más caro, vale la pena.

Si se ocupa el seguro, como en la sustitución de piezas de carrocería por un accidente, asegúrate de que se utilizan piezas originales o, en su defecto, de primera calidad.

Guardado y conservación

Dónde y cómo guardes el coche también afecta a su vida útil. Huelga decir que lo ideal es guardarlo en un garaje.

Si esto no es posible, intenta aparcar en la sombra. Utiliza parasoles y, si quieres rizar el rizo, fundas (no son caras, aunque también las hay a medida si quieres). El polvo y la radiación ultravioleta del sol son terribles para la pintura (sí, y los proyectiles de los pájaros también) y el calor lo es para la tapicería y los guarnecidos, especialmente el plástico.

Lavar el coche con frecuencia como decíamos en el punto del óxido también ayuda a mantener el coche joven ya que previene el deterioro de la tapicería y plásticos interiores.

Finalmente, si vas a tener el coche guardado algún tiempo, te aconsejamos que desconectes la batería (y si es mucho, que la desmontes), y que dejes todos los niveles al máximo, incluso la gasolina.

Esperamos que estos breves consejos te sean de utilidad y que atendiéndolos puedas alargar la vida de tu coche tanto tiempo como quieras. Y si necesitas encontrar un taller de confianza cerca de ti para que te ayude en el proceso, recuerda que Autootools está a tu servicio para ello.

Encontrarás un vídeo sobre el tema con explicaciones amenas y sencillas en el siguiente vídeo del canal de YouTube Garaje Hermético:

Deja un comentario